Histórico debate entre Macri y Scioli a 7 días del balotaje
noviembre 15, 2015
A siete días del primer balotaje presidencial de la historia argentina, esta noche, desde las 21, Mauricio Macri y Daniel Scioli participarán de un debate sin precedentes en la Facultad de Derecho de la UBA, que transmitirán todos los canales de aire en simultáneo. Para el candidato de Frente para la Victoria representa una oportunidad sin igual para exponer a su adversario y apuntalar sus chances. El aspirante de Cambiemos, en cambio, procurará no cambiar el estudiado discurso conciliatorio que repite desde el 25 de octubre para evitar arriesgar los números que hoy le dan casi todas las encuestas.
Scioli se había negado a participar del debate con los otros cinco candidatos antes de la primera vuelta, cuando era amplio favorito. Entonces adujo que el mecanismo debía ser legislado por ley y que su programa de gobierno estaba claro. En el escenario del auditorio universitario se exhibió un atril vacío con el nombre del gobernador.
Ahora, sin nueva ley que regule el encuentro, se medirá con Macri durante una hora y media. Los ejes temáticos serán cuatro: desarrollo económico y humano, educación e infancia, seguridad y derechos humanos y fortalecimiento democrático. La dinámica que acordaron los enviados de los candidatos –Miguel de Godoy, en representación de Macri; y Juan Cuorel y Carlos Gianella, por el lado de Scioli– con el comité de Argentina Debate, la ONG que impulsó la iniciativa, garantizará cruces más picantes que en el debate previo. En cada bloque, un candidato expondrá durante dos minutos un tema y su adversario tendrá un minuto para preguntar. Luego de la respuesta –la gran novedad– habrá otro minuto más para repreguntar. Por sorteo, Macri será el encargado de abrir el debate y Scioli, de cerrarlo.
Aunque planean estrategias opuestas, los dos candidatos comparten algunas condiciones: se prepararon en el más absoluto hermetismo y limitaron sus actividades de campaña. El viernes Macri había suspendido un recorrido por José C. Paz y Scioli, que mantiene una agenda frenética, se reunió con dirigentes ferroviarios en Retiro. Ayer, por respeto a las víctimas del atentado terrorista en París, ambos cancelaron actividades. Se concentraron junto a sus respectivos equipos, como en los días previos, para la cita de esta noche. Scioli, en el edificio del Banco Provincia en el microcentro y Macri, en el auditorio del gobierno de la Ciudad. En los dos casos se repitieron simulacros y ensayaron respuestas a preguntas incómodas.
En el entorno del candidato oficialista, que componen su jefe de gabinete Alberto Pérez, Cuorel, Gianella y Gustavo Marangoni, prometen un Scioli “más audaz que nunca”. El gobernador buscará exponer las contradicciones del jefe de Gobierno sobre temas sensibles como Aerolíneas, YPF, la estatización de las AFJP, y sembrar dudas sobre la dirección económica que podría tomar el país si Macri resulta elegido: desde los planes sociales, al valor del dólar y el endeudamiento.
Macri, que contó con la asesoría de un equipo de 10 colaboradores, que lideran su jefe de campaña Marcos Peña, De Godoy y Jaime Durán Barba, apostará más al tono conciliador con el que se siente más cómodo. Tiene además una batería de temas que incomodan al Gobierno –desde Amado Boudou hasta Hotesur y Alberto Nisman– para desarticular el intento de Scioli por mostrarse independiente a la conducción del kirchnerismo. Además de propuestas, en el macrismo no descartan sorpresas: ¿confirmará qué cargos ocuparían sus referentes económicos, que tantos dolores de cabeza le trajeron en estos días, o habrá que esperar?
En el PRO confían en hacer valer la gimnasia para debatir que acumuló Macri en 2003, 2005 y 2007. Quieren seguir creyendo que estos escenarios influyen poco y nada en el resultado de una elección. Scioli, que acudió a un debate por última vez en 2003, se entusiasma con lo contrario.