Netflix confirmó la serie de «El Eternauta» y nuevas producciones locales

El director de Netflix, Reed Hastings, llegó a Buenos Aires para presentar todas las novedades de la plataforma en nuestro país. En el marco del evento Che Netflix, en la Usina del Arte, el CEO de la empresa anunció nuevas producciones locales como «Casi feliz» con Natalie Pérez y Sebastián Wanraich, que se estrenará el 1° de mayo, «El cuaderno de María», una película con Valeria Bertucelli y Malena Pichot y el musical «Cielo grande».

Además confirmaron la adaptación de «El Eternauta». La historieta escrita por Héctor Germán Oesterheld y dibujada por Francisco Solano López tendrá su serie producida por K&S Films («La odisea de los giles», «El Ángel», «Relatos salvajes») y dirigida Bruno Stagnaro («Un gallo para Esculapio», «Okupas»). Netflix compró los derechos para todo el mundo y cuenta con el aval de la familia de Oesterheld. El estreno está previsto para fines de 2021 o comienzos de 2022.

En el evento también se repasaron los nombres de las series y películas de producción argentina que llegarán a la plataforma los próximos meses, como el documental «Fangio, el hombre que domaba las máquinas», que llegará el 20 de marzo, y «La corazonada», la película protagonizada por Luisana Lopilato y Joaquín Furriel, que se estrenará el próximo 28 de mayo.

Las palabras de Hastings. El empresario que arrancó sirviendo café dijo que siempre supo que internet sería el futuro y aclaró que «Argentina es uno de los 10 países del mundo más importantes para Netflix en cuanto a membresías. Brasil y México siguen adelante, pero tenemos esperanzas de que Argentina crezca rápido». Además, expresó que en su opinión el entrenamiento está uniendo a la gente, que están trabajando para eso y también para seguir compartiendo historias argentinas en todo el mundo.

«Hace mucho tiempo la mujer tenía dos roles importantes. Era la que lloraba, contenida y consolada por un macho valiente, o era la llorada, porque estaba muerta. Tenía dos líneas de diálogo y después su trabajo era ser cadáver. Con el correr del tiempo, el rol de la mujer empezó a crecer al mismo tiempo que en la calle», comentó Etcheves, que también destacó el derecho de las mujeres a fallar, «no sea cosa que nos agranden la cocina». «Tenemos derecho a ser malas, inútiles, villanas, asesinas. Todo lo que los personajes masculinos han esgrimido a lo largo del tiempo», decretó.